(Por Juan Pablo S.)
El CDC (Centers for Disease Control and Prevention) de EE.UU publica oficialmente 6% de fallecimientos por causas directa de la enfermedad de Covid-19 en la Tabla 3 de su informe (1), es decir, poco más de 13 mil fallecimientos por Covid-19 como causa directa de los casi 223 mil fallecimientos confirmados en EE.UU.
En todos los demás casos, la enfermedad de Covid-19 se manifiesta como causa que acompaña y acelera cuadros agravados por comorbilidades o patologías complejas en la inmensa mayoría de los casos, con una sobrevida general superior al 95%. Por eso es cuestionable en todo el mundo el asunto del exceso de mortalidad por o con Covid-19. La realidad es que se han suscitado dos situaciones ocurriendo al mismo tiempo y sobre lo cual no es sencillo separar estadísticamente los efectos de uno y otro, hablamos de los fallecimientos debido a la pandemia viral (como causa directa o agravante), y las muertes no evitadas por desatención debido al confinamiento.
La realidad estadística de EE.UU, ordenada para una mejor comprensión por el biofísico y premio Nobel de Química 2013, Michael Levitt, a partir de datos de el CDC (2), muestra que el número de fallecimientos totales para el acumulado de 2020 por o con la enfermedad de Covid-19 es de poco más de 200 mil a la fecha de la preparación del resumen, con un exceso de mortalidad general comparado al promedio de años anteriores, de 251 mil fallecimientos aproximadamente sumando todas las causas. De estos 251 mil, 51 mil es exceso de mortalidad debido a Covid-19 (20%). El porcentaje restante es, posiblemente, atribuible a espectro de causas comunes no evitadas o agravadas debido al bloqueo y la desatención hospitalaria entre múltiples factores.
El argumento anterior se refuerza con lo publicado por patólogos forenses de Reino Unido (3) que identifican efectos indirectos de Covid-19 en las autopsias coronarias. Preliminarmente, hasta 25% del exceso de mortalidad general es atribuible, no a Covid-19 no detectado, sino a fallecimientos no evitados por acceso reducido a centros de salud (infartos miocardios, cetoacidosis diabética, tres de diez causas de suicidios asociados a presiones financieras o trabajo, etc.). Este tipo de resultados son preliminares y se deben entender en el contexto de limitaciones para realización de autopsias durante el periodo de pandemia, es decir, posiblemente existan más conclusiones por venir al respecto.
Por otro lado, OMS redujo más de 90% registro de la circulación global de gripes e influenzas desde la semana 14 (abril) de 2020, en comparación al mismo periodo 2019 (4). Nuevamente se abre un cuestionamiento sobre qué porcentaje ocupa Covid-19 como causa real directa de la enfermedad sobre el exceso de mortalidad general en todo el planeta.
Recientemente, el ex ministro de salud en Chile Jaime Mañalich, argumenta como defensa, en su calidad de imputado, ante la pregunta "¿Cuántos fallecidos tiene Chile hoy en exceso?, juntando la información de los fallecidos esperados, más los confirmados y sospechosos por covid. ¿Cuántos?, cero, no tenemos ninguna cifra de exceso de fallecidos", aseveró y agregó que "a mayor abundancia tenemos 544 fallecidos menos que los esperados más los casos covid" (5).
Finalmente, una pandemia que no crea exceso importante de mortalidad por causa directa y sí un exceso indirecto a raíz de las medidas, ¿qué puede significar realmente?
Fuentes:
(1)https://www.cdc.gov/nchs/nvss/vsrr/covid_weekly/index.htm
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